John Marshall Harlan (1833–1911)
Paladín de los derechos civiles, el juez John Marshall Harlan fue el único disidente en el caso Plessy v. Ferguson (1896), que estableció la doctrina “separados pero iguales”, sosteniendo que la segregación racial era legal. En 1901 Harlan disintió en Downes v. Bidwell, que reorientó la política territorial de EE.UU. En este caso, el Tribunal Supremo concluyó por mayoría que los aranceles dispuestos por la Ley Foraker eran constitucionales porque Puerto Rico no estaba “en Estados Unidos” y “para fines nacionales” se consideraba “extranjero”. Puerto Rico fue designado territorio “no incorporado”, nueva distinción legal creada por el Tribunal que disponía que la Constitución no se aplicaba inmediatamente al territorio.
En una serie de casos concurrentes, conocidos en conjunto como los Casos insulares, la nueva política territorial se extendió a Filipinas y Guam. Downes v. Bidwell sigue siendo el precedente más relevante en casos del Tribunal Supremo relacionados con la política territorial de EE.UU.
Transcripción de audio: La controversia ante el Tribunal Supremo en Downes v. Bidwell increíblemente tenía que ver con unos cientos de dólares en naranjas. Es increíble pensar que hoy en día, esas naranjas han determinado los derechos constitucionales de los ciudadanos que residen en los territorios de los Estados Unidos. ¿Por qué los Casos Insulares son pertinentes hoy en día? Actualmente, estos casos siguen vigentes y permiten a la rama ejecutiva y la rama legislativa del gobierno de los Estados Unidos a discriminar contra los territorios y los ciudadanos de los Estados Unidos quienes viven en dichos territorios. Un ejemplo: Yo vivo en Puerto Rico. Soy ciudadano de los Estados Unidos. Pero no puedo votar por el presidente de los Estados Unidos. Tampoco en los territorios necesariamente aplica el derecho a juicio por jurado en los casos civiles, o el derecho de ser acusado criminalmente por un gran jurado, y estos son derechos que aplican automáticamente por la constitución de los Estados Unidos en los estados. En el momento del Juez Harlan disentir en Downes v. Bidwell su postura constitucional solo fue compartida por dos académicos. Sin embargo, durante el último siglo muchísimos jueces, académicos y otras personas se han unido a su pensamiento– más recientemente, los jueces asociados del Tribunal Supremo de los Estados Unidos Sonia Sotomayor y Neil Gorsuch.
– Soy el Juez Gustavo Gelpí. Soy juez del Tribunal de los Estados Unidos de Apelaciones para el Primer Circuito, en Boston.